Aprendiendo el alfabeto desde la perspectiva de un niño

El aprendizaje literario temprano de los niños preescolares se da a través de los discursos e historias de la vida diaria. Es así como adquieren las diversas estrategias para la producción de mensajes y logran darle significado a su entorno.
Conocer el alfabeto va más allá de saber recitarlo, se trata de aprender el nombre de las letras, cómo se representan gráficamente y cómo suenan. Esto es esencial para el posterior aprendizaje de lectura y escritura.
Los niños entran a la escuela sabiendo algo del alfabeto, con nociones literarias, por esto, es fundamental la acción de los educadores, los cuales deben actuar a partir de lo que el niño sabe. El artículo pretende descubrir cómo pueden utilizar los educadores las observaciones de las relaciones de los niños con las letras para así, promover un apoyo más efectivo para el aprendizaje del alfabeto.
¿Qué saben los niños del alfabeto?
Los niños aprenden del alfabeto mucho antes de entrar a la escuela. A los 3 años pueden nombrar un promedio de 10 letras. Incluso, se encuentran concientes de que las letras se forman por líneas, curvas, etc.Los preescolares incluso (según estudios) ya han aprendido a reconocer y a diferenciar las formas de éstas, son hasta capaces de crear nuevas letras en base a las que ya conocen y representan gráficamente primero las letras de personas u objetos que son significativos para ellos.
A la edad de 4 años, aparecerá la "conciencia metacognitiva", en donde el pequeño se dará cuenta que ha realizado una letra luego de haberla escrito inconcientemente. Ponen en práctica las letras del alfabeto que ya conocen, lo que demuestra que los niños comienzan a estar concientes o alerta sobre sus conocimientos del alfabeto durante los años preescolares.
El conocimiento que manejan acerca del rol de las letras, no es el mismo que tienen los adultos. Muchas veces sólo relacionan las letras con nombres de personas, y no son capaces de concevirlas como unidades dentro de una palabra o como las encragadas de representar sonidos.
Sin embrago, muy pronto lo comprenderán. Esto sucede cuando comienzan a escribir sus nombres, a separarlos en sílabas y más aún, cuando se les enseñan los fonemas.
¿Bajo qué condiciones aprenden el alfabeto?
Un niño de 3 años puede escribir su nombre con letras que son aproximaciones cercanas a las verdaderas, son capaces de reconocer muchas letras graficadas pertenecientes a su entorno, siempre y cuando sean estimulados y apoyados por sus padres, haciéndolos partícipes en la vida cotidiana e iniciando rutinas en familia. Las rutinas, son diálogos interactivos entre padres e hijos que siguen patrones predecibles. El niño internaliza la estructura de la acción y habla dentro de la actividad, para luego poder completarla de forma independiente.
Los padres, conciente o inconcientemente, son los encargados de expandir los contextos de aprendizaje de letras, juegan un rol importante en capturar el interés de sus hijos.